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Verano, insectos y picaduras

Ya llega el verano y con él la exposición al sol y las temidas picaduras de insectos como avispas, abejas, mosquitos. Muchos somos los que tenemos esa preocupación y más bien obsesión con que no te piquen y, en el caso de que lo hagan, que la reacción en nuestro cuerpo sea la más suave posible.

¿Pero tenemos claro lo que tenemos que echarnos una vez nos han picado? ¿Será mejor vinagre o amoníaco? ¿Da igual el tipo de picadura que sea? En este artículo quisiera poner un poco de luz ante esto.

En el caso de la abeja, el veneno lo aloja en un saquito. Es importante no apretar el saquito para no introducir el veneno en la piel. Habría que desprender el saco y la lanceta con una aguja. Si el aguijón está clavado, habría que quitarlo raspándolo hacia fuera con el borde de una tarjeta de crédito o similar. Su veneno es ácido, con lo que el remedio que deseemos aplicar debería ser de un pH contrario, por lo que es recomendable aplicar una compresa con una disolución alcalina (bicarbonato sódico, amoniaco, o agua de mar) para neutralizar o bien una pasta hecha con bicarbonato y agua y dejar que seque.

Vamos con el caso de la avispa. Lo primero que debemos hacer es extraer el aguijón. Seguidamente aplicar una compresa con una sustancia ácida (vinagre) y agua fría al 50% para neutralizar el veneno. También recomiendo para extraer el veneno emplasto de arcilla. Otra alternativa es echar diretamente zumo de limón o de tomate encima de la zona afectada.

En el caso de los mosquitos que no inyectan veneno y es su propia saliva lo que hace reacción con nuestro cuerpo, lo primero que hay que hacer es lavar la zona para retirar la saliva y después tenemos varias opciones. Un es cubrir con pasta de dientes la zona, otra echar amoníaco o también aplicar hielo.

¿Y qué ocurre en el caso de las medusas? La cosa se complica un poco. Son muchos los consejos que están en la tradición popular, algunos de los cuales pueden empeorar y mucho la situación. Así, por ejemplo, no aconsejo orinar, ni limpiar con arena. El vinagre y el amoníaco puede empeorar la herida, ya que cada medusa tiene su veneno con características distintas. Es decir, hay medusas con veneno pH ácido y otras alcalino. Por este motivo, si no conoces la medusa, puedes equivocarte. Si tienes suerte con la especie, algo de vinagre pude que ayude o urea en alta concentración (no orina).

En el Mediterráneo existe una especie de medusa, la Pelagia Noctiluca, cuya picadura puede empeorar por el tratamiento con vinagre. En este caso lo recomendable sería amoníaco rebajado al 50%. No obstante, el vinagre resulta de utilidad para otras medusas comunes en las costas españolas.

Una vez que te hayas librado de la medusa con vinagre y pinzas (o alguna urea súper concentrada), aplica calor a la lesión. Es posible que tu sensación sea de querer que el hielo enfríe la ardiente herida, pero es el calor realmente el que reduce la actividad del veneno, por lo que terminarás con menos daño a largo plazo.

Esperemos que este verano sea tranquilo en cuanto a picaduras se refiere y, en el caso de tenerlas, pues que estos consejos os puedan aliviar.

Por Juan Carlos Gálvez

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